Para destacarte como Auxiliar Administrativo en Salud, necesitarás combinar habilidades técnicas con competencias interpersonales que te permitan brindar una atención de calidad.
Habilidades blandas:
- Comunicación asertiva: Fundamental para transmitir información clara a pacientes y personal médico. Puedes desarrollarla participando en talleres de comunicación efectiva.
- Orientación al servicio: Actitud empática hacia las necesidades de los usuarios. Practica escucha activa en cada interacción.
- Trabajo en equipo: Colaboración efectiva con personal médico y administrativo. Participa activamente en proyectos grupales para fortalecer esta habilidad.
- Seguimiento de instrucciones: Capacidad para ejecutar procedimientos con precisión. Desarrolla métodos personales para organizar tareas.
- Proactividad: Anticipación a necesidades y resolución de problemas. Busca oportunidades para proponer mejoras en tu entorno.
Habilidades duras:
- Manejo de TIC: Dominio de sistemas de gestión hospitalaria y herramientas ofimáticas. Actualízate constantemente con cursos específicos.
- Comprensión de lectura: Interpretación correcta de documentos médicos y administrativos. Practica con textos técnicos del sector.
- Lógica matemática: Necesaria para facturación y manejo de valores. Refuérzala con ejercicios prácticos de cálculo.
- Conocimientos en primeros auxilios: Útil para situaciones de emergencia. Certifícate en cursos básicos.
- Humanización del servicio: Enfoque centrado en la dignidad del paciente. Participa en talleres sobre atención humanizada.
