Las áreas con mayor crecimiento incluyen medicina familiar, telemedicina, enfermería especializada, fisioterapia, salud mental, biotecnología y salud pública. También destacan la bioinformática, la geriatría, la medicina preventiva y la gestión hospitalaria. La integración de inteligencia artificial y análisis de datos impulsa la demanda de profesionales tecnológicos en salud. El envejecimiento poblacional y el aumento de enfermedades crónicas incrementan la necesidad de atención integral. Los profesionales que combinan conocimientos clínicos, digitales y humanos tendrán las mejores oportunidades laborales en un sistema sanitario más innovador, sostenible y centrado en el paciente.
