En Colombia, los vigilantes deben tener certificado de curso de vigilancia aprobado por una academia avalada por la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada. Este curso cubre normatividad, defensa personal, primeros auxilios, atención al cliente y manejo de crisis. También deben contar con examen psicofísico, libreta militar definida, antecedentes limpios y aptitud para portar uniforme. Para labores armadas se requiere licencia de porte y entrenamiento adicional. Los guardas deben renovar la certificación cada dos años. Cumplir con la regulación asegura la legalidad, confianza y profesionalismo en el desempeño del servicio de seguridad privada.
